Que el corazón no se pase de moda…

En la vida hay momentos difíciles, o como diría Gomaespuma, momentos «francamente». Ya sabéis, traumas infantiles que con terapia, cariño y tiempo hemos ido curando, o más recientemente, heridas sentimentales de diversa gravedad, como rupturas por falta de química o excesos de locura o malicia, o incluso no saber sintonizar...